Mural “Desap.ego”

• Escultura de 2 mts. de ancho por 2.40 mts. de alto

• 36 piezas únicas de cerámica de diversos tamaños (15 a 45 cms.)

• 300 flores de cerámica de 3 cms. De diámetro

• Estructura de madera blanca

• 60 kilos de pasta de cerámica gres con doble cocción a alta temperatura (1.240 grados)

• 2 kilos de alambre recocido calibre 18

• 5 litros de esmalte gris de ceniza de eucaliptus

• 1 litro de engobe negro

• 1 litro de esmalte metalizado

• Montaje con pernos de fierro adosados al soporte

• Fabriqué un tótem de madera como soporte realizado en planchas de mdf y palos de pino. Lo pinté blanco.

• Probé en soportes y en el suelo diferentes composiciones de las piezas hasta que di con la indicada. Fue como “pintar” con cerámica.

• Finalmente, instalé las piezas sobre el soporte.

• La obra la expuse en la feria de arte Artweek noviembre de 2023 en Estación Mapocho, Santiago de Chile y obtuve el 3° lugar en la categoría de mejores stands, entre 280 artistas, en mi debut en dicha feria.

Comencé esta obra trabajando en alambre y malla de alambre. Armé unos capullos de 60 cms. de alto aproximadamente, y luego probé con diferentes “pieles” para los pétalos, hechas de aserrín y colafría, malla de kiwi, mallas de pantys, yeso.

Ninguno de estos materiales me satisfizo, principalmente porque no lograban la transparencia que yo buscaba…y la sombra.

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Fue entonces cuando pensé en volver a mi medio expresivo: la cerámica. Hice pétalos de este material con perforaciones que permitían ver a través de ellos. Utilicé los pétalos de malla de alambre como moldes para dar forma a cada unidad y probé con armar el capullo de cerámica, pero presentaba demasiada fricción, así es que decidí llevarlo a la pared. 

Luego realicé flores de cerámica que, unidas con alambre, dieron cohesión, volumen, caos y orden a la obra.

 Quise representar el desprendimiento de barreras, del ego dominante, salirse de la zona de confort para que aparezca la verdadera esencia.

Los capullos desintegrados reflejan la piel de la cual nos vestimos (ego) cuando se va saliendo y deja entrever el interior, como un jardín secreto y se asoma la belleza de las flores, que fluyen orgánicamente y revelan el auténtico ser.

La sombra es el reflejo de lo que va quedando en este sanador proceso de búsqueda de la identidad.